Fennia se encontró con Petri Kaivanto en el histórico bar “Florida Garden” , en la ciudad de Buenos Aires, donde Petri estaba con su radiante esposa cubana, Claudia Pomares. Hace más de quince años que el músico finlandés tiene relación con Argentina y ahora ya quiere quedar para siempre. Ha venido a nuestro país siguiendo los pasos de Eino Grön, famoso ícono del tango finlandés, que había viajado varias veces a este país austral para integrar en el tango finlandés características propias del porteño. Ambos quieren darle una orientación más argentina al tango que se canta y baila en Finlandia.

Petri agrega otra iniciativa, la de fusionar el tango, con música folklórica y otros ritmo populares.
¿Cómo descubriste el tango?
Todo empezó en mí por “contrera”, quería salir de las enseñanzas habituales y música angloamericana. Desde niño me gustaba música latina y mediterránea y estudiaba italiano y francés. En el Liceo Sibelius de Finlandia conocí a Petri Ikkelä, el único que tenía un bandoneón en mi entorno. Con un grupo de compañeros de escuela creamos un grupo de tango y tuvimos suerte: nos hicimos famosos. Se llamaba “Los Leotardos”. Sin embargo, llegados a la fama me sacaron del grupo y me olvidé del tango.
¿Cuál es tu relación con Eino Grön?
Descubrí que Grön había grabado dos álbumes en Argentina, pero sin grabar un tango finlandés en castellano para proponer esta locura al publico porteño y busqué hacerlo yo. Una amiga Ulla-Maija Jäske que había vivido en Buenos Aires, me presentó a su amigo guitarrista Alejandro Polemann, que estaba dando conciertos en París, además de visitar Finlandia. Entre el 2001 y el 2004 nos hablamos y pasamos ideas, hasta que decidí venir a Argentina y grabé cuatro temas de tango en ese primer breve En el 2006 conocía a Pertti Mustonen, finlandés que vive hace varias décadas en Buenos Aires, dedicado al tango, entre otras actividades, me asesoró mucho sobre las posibilidades que había aquí y me orientó un poco al tango y a la Argentina en general.
Resultado de toda esa búsqueda fue : “Aires de Finlandia” volumen 1. Grabado en 2007, 18 temas, todo en finés y castellano. Y para festejar la grabación ya logramos organizar mi primer concierto en Esquina Homero Manzi, San Juan y Boedo. Luego en Helsinki, Tallinn y San Petersburgo.

Y…¿cuándo conociste a Claudia?
En el 2015 me divorcié de mi primera esposa. La suerte me llevó a Cuba y conocía a Claudia, que trabajaba en un hotel en Trinidad, como animadora del espectáculo. Yo había ido con un grupo de turistas para hacer spot de promoción de Cuba. En el 2016 me casé con Claudia. Vivimos entre Finlandia y Cuba un tiempo.
En el 2017 obtuve un subsidio de la Fundación Wihuri (Finlandia) por cinco meses, para el lanzamiento de mi álbum “Aires de Finlandia 2”. Hicimos conciertos en La Plata y Buenos Aires. Después filmamos y publicamos dos videos con nuestros invitados de lujo: Franco Luciani, el armonicista virtuoso, y Javier Calamaro. Este subsidio nos permitió de vivir ya 6 meses en Buenos Aires. Pasamos el invierno de acá en el verano finlandés.
Regresamos en el octubre pasado para terminar otro objetivo principal del subsidio: Aires de Finlandia acompañó la película muda finlandesa ”La novia del girador de troncos” en el Festival de Cine y Música de San Isidro con músicas originales compuestas por mi y temas nuestro repertorio. Desde años Marcela Casinelli, la directora de Cinemateca Argentina, es mi querida amiga y finalmente concretamos este proyecto que espero de repetir en otros festivales de cine. Yo he compuesto 3 comedias musicales pero esta fue mi primera grande composición instrumental.
Ahora queremos quedarnos a vivir en Argentina.
Y a vos Claudia ¿qué te gusta de la Argentina?
Me gusta la gente, y como estoy acostumbrada a vivir cerca del mar, nos alquilamos con Petri, un departamento en Villa Gesell frente al muelle. Allí tenemos de todo, un grupo de tango que organiza milongas en diferentes lugares. Y abajo de donde vivimos está el mejor lugar para comer pescado en la Villa: Olga y Lito. Aprendí a comer carne de res, allá en Cuba hay pero no es rica. Hay buenos colegios en este lugar de playa, algo importante porque nuestro proyecto de este año es lograr traer a mi hijo, para que viva acá con nosotros.
Y a vos Petri ¿qué te gustó de Cuba? ¿Y de Argentina?
De Cuba me gustó la vida alegre, no es un país rico, pero la gente vive y tiene educación, salud. Es decir, las necesidades cubiertas. Y Claudia, me presentó a los mejores músicos de su ciudad, algo muy interesante y divertido. Y de Argentina, como ya dije, me gusta el tango y Villa Gesell, que es un lugar extraordinario para vivir para nosotros.
Petri Kaivanto trabaja actualmente como traductor de series y películas, del inglés al finés, principalmente. En el futuro él espera de volver a hacer algo de periodismo y teatro, y traer turistas finlandeses a Argentina.